martes, 25 de agosto de 2020

CIVILITAS ESTÁ DE DUELO

 LUISMA CALLEJA

Desde el comienzo de Civilitas en Argentina hace ya treinta años, pero con mayor intensidad desde el inicio de Ciivilitas-Europa hace diez, contamos con un consejero y asesor excepcional, tanto por sus conocimientos como por su total disponibilidad, consecuencia de su inmensa generosidad: Luis Manuel Calleja Corujedo. Luisma, como era conocido internacionalmente, aunque estudió Ciencias Físicas en la Universidad Complutense, destacó enseguida en campos mucho más amplios. Ya como Decano en el Colegio Mayor Moncloa se convirtió en una celebridad por su extraordinario ingenio para organizar y dirigir actividades culturales y festivas tan propias del ambiente universitario: su simpatía, buen humor, creatividad y capacidad como actor parecían no tener límites. Era requerido de todas partes como animador de cualquier tipo de eventos. Quisieron contratarlo en la televisión y el cine, pero él sabía que era un auténtico universitario y que no debía dejar su ambiente.

Después de unos años como director de empresas realizó el Master en Dirección de Empresas en el IESE de la Universidad de Navarra, y aquí surgió una nueva faz de su genio: se convirtió en un profesor de Política y gobierno de la Empresa de prestigio internacional. Era profesor en el IESE, principalmente en su sede de Madrid, preocupado siempre -acompañado de José Luis Lucas Tomás- de mantener viva la escuela de Antonio Valero fundador de esa institución. Pero a la vez, llamado a dar clases y formar profesores en sitios muy distantes en el mundo: en el AESE de Lisboa, en el IEEM de Montevideo –donde tenía puesto su corazón- o en la naciente Universidad del Atlántico Medio en las Islas Canarias, o en San Telmo de Sevilla, o en Angola, Costa de Marfil, Argentina, Brasil, Colombia, … Allí donde convenía que arrancara con buen pie una nueva escuela de negocios allí lo llamaban para asegurar el éxito inicial. Todos sabían que no se iba a negar por su generosidad sin límites.

Esta vida de profesor e investigador tan amplia, lo fueron convirtiendo en el asesor o consejero imprescindible, y así CIVILITAS también puso beneficiarse de su invalorable ayuda: fue miembro de la primera comisión directiva de CIVILITAS-EUROPA, y luego Delegado en Madrid.

El pasado 15 de julio Luisma se nos fue, pero trabajando y ayudando hasta el último aliento, como puede verse en sus clases online que circulan por internet, cuando ya era un enfermo terminal, emocionándonos a todos con su increíble espíritu de servicio. En agosto de 2019 le apareció un cáncer de esófago; cuando por efecto de la fuerte quimioterapia le desapareció –estando en la Clínica Universitaria de Navarra- en ese momento apareció una metástasis cerebral dolorosísima que, después de escasas dos semanas se lo llevó a donde tanto lo merecía. Descanse en paz y en la Gloria quien nos dejó un ejemplo insuperable.